Cuando se trata de cocina saludable y reconfortante, las recetas con patata siempre se llevan un lugar privilegiado en nuestra mesa. Hoy en Patatas Ariza te proponemos una deliciosa y nutritiva forma de disfrutarla: unos pastelitos de verduras al horno, gratinados con queso y acompañados de salsa de tomate. Una receta que combina lo mejor de la huerta con el sabor y la textura suave de la patata.
Una receta con patata ideal para cuidarse (y disfrutar)
Comenzamos cociendo nuestras patatas con piel, junto con unas zanahorias peladas, en agua con sal. Cuando estén tiernas, escurrimos, pelamos y trituramos las patatas hasta obtener un puré suave. Las zanahorias se cortan en pequeños dados para añadir textura y color al plato.
Mientras tanto, preparamos el sofrito: cebolla, ajo y pimiento bien picados y salteados en aceite de oliva virgen extra. Cuando la cebolla comience a transparentarse, incorporamos las setas y, una vez hayan soltado su jugo, añadimos las espinacas, cocinándolas brevemente para que conserven su color y nutrientes.
Con el fuego ya apagado, mezclamos el puré de patata con las verduras salteadas, la zanahoria cocida, un chorrito de nata y un par de huevos. Salpimentamos, removemos bien, y ya tenemos la base de nuestros pastelitos.
Horno, queso y presentación final
Rellenamos moldes individuales (tipo flaneras) previamente engrasados con mantequilla, espolvoreamos con abundante queso rallado y los llevamos al horno a 180ºC para gratinar. Cuando el queso esté fundido y dorado, dejamos templar, desmoldamos y ¡listo! Un plato vistoso, nutritivo y lleno de sabor.
Puedes acompañarlos con una salsa de tomate casera para darles un punto ácido que equilibra perfectamente la cremosidad de la mezcla.
Patatas Ariza: el ingrediente que marca la diferencia
Para conseguir una textura perfecta y un sabor auténtico, te recomendamos utilizar nuestras Patatas Ariza, cultivadas con mimo y seleccionadas para ofrecer siempre la mejor calidad en tu cocina. Esta receta es solo una de las muchas maneras en las que puedes incorporarlas en tus platos del día a día, o en ocasiones especiales.